¿Los baby boomers arruinaron a los Estados Unidos?

Opinión / Economía Política

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Cubamatinal / Referirse a alguien como sociópata es un lenguaje fuerte. Después de todo, solo entre el 3 y el 5 por ciento de los estadounidenses son realmente sociópatas, personas que inicialmente parecen encantadoras, pero debido a una mala conexión neurológica, carecen de conciencia y no pueden sentir remordimientos. Son mentirosos y tramposos excepcionales, y no tienen capacidad para sentirse culpable.

Por

Washington, 16 de diciembre de 2018/ Mises Wire / Pero según el autor y gestor de fondos de cobertura tecnológicos multimillonario, Bruce Cannon Gibney, todos los nacidos entre 1946 y 1964 («baby boomers») que aún viven son sociópatas.

«Hay algo malo con los Boomers y lo ha estado durante mucho tiempo«, escribe Gibney en el reenvío a A Generation of Sociopaths: How the Baby Boomers Betrayed America y las palizas del autor continúan durante más de 400 páginas.

No nos permite que ninguno de los Boomers nos libere, sino que realmente se enfoca en «representantes generacionales como Bill Clinton, Newt Gingrich, George W. Bush, Donald Trump y Dennis Hastert — un guiso de mujeriegos, insumisos militares, evasores de impuestos incompetentes, hipócritas, titulares de altos cargos censurados por violaciones de ética, un sundae sociopático cuya cereza escuálida fue proporcionada en 2016 por la admisión de Hastert de abuso infantil, en sí misma una metáfora grotesca para las políticas Boomer».

El punto de Gibney es que nosotros, los Boomers, estamos abusando sexualmente de las generaciones más jóvenes, porque el Seguro Social y el Medicare podrían permanecer solventes el tiempo suficiente para que los Boomers, pero nadie más, puedan cobrarlo. Y, el autor predica desde el buen libro ambientalista cada oportunidad que tiene. Se considera que cualquier escepticismo sobre el cambio climático tiene «sentimientos negativos sobre la realidad y la ciencia» porque, para los Boomers, los sacrificios por el medio ambiente son «incompatibles con los deseos sociopáticos».

Los Boomers no tuvieron oportunidad porque sus madres leyeron al Dr. Spock, fueron demasiado fáciles con sus hijos y nos estacionaron frente a la televisión. «Las características esenciales de la televisión la convierten en la educación perfecta para los sociópatas, facilitando el engaño, la capacidad de adquisición, la intransigencia y la validación de una cosmovisión poco ligada a la realidad», opina el autor. La obsesión del actual presidente con ver televisión se presenta como un buen ejemplo.

A lo largo del capítulo seis, «Disco y las raíces del neoliberalismo«, ¿a quién se cita en la materia previa del capítulo? Ludwig von Mises. «Todo el mundo piensa en economía, sea consciente de ello o no. Al unirse a un partido político y al emitir su voto, el ciudadano toma una posición implícita sobre las teorías económicas esenciales».

Gibney escribe que el neoliberalismo de los Boomer «es más libre mercado a la carta«. Quién sabía que los Boomers hicieron que el Estado hiciera «un mínimo, limitándose al arbitraje de disputas, la defensa nacional y la oferta de algunas obras públicas como el correo.»

El autor quiere que creamos que el liberalismo de los Boomer se implementó de costa a costa y el laissez faire ha gobernado al día. Gibney escribe sobre la «utopía capitalista … el punto omega de la revolución neoliberal moderna. Esto es lo que entusiasman a los diversos acólitos neoliberales (los santos Paul: Ryan, Rand, Ron), golpeados en la cabeza por La Rebelión de Atlas en sus caminos a Washington.» Incluso afirma que la Sociedad Mont Pelerin ha sido influyente.

Se hace mención a los «austriacos» y a la «Escuela de Chicago» que ambos creen que el Estado debería salir del camino y dejar que las personas se cuiden a sí mismas. El autor sostiene que «el neoliberalismo depende de supuestos clave y problemáticos: que los individuos son racionales, prudentes e informados, y que, por lo tanto, se puede confiar en ellos para satisfacer sus propias necesidades«.

Sin embargo, citando a Amos Tversky y Daniel Kahneman, no todos los humanos son racionales. Los humanos no son homo economicus, sino homosapiens, con los Boomers, en su opinión, homo sociopathicus.

Sin embargo, la combinación de Gibney de la Escuela de Chicago y los austriacos pierde la marca. En opinión de Mises, la economía no se ocupa en absoluto del homo economicus , sino del homo agens: el hombre «como realmente es, a menudo es débil, estúpido, desconsiderado y mal instruido».

En Problemas Epistemológicos de la Economía, Ludwig von Mises explica que el homo economicus sería el hombre de negocios perfecto, dirigiendo una empresa para obtener el máximo beneficio: «Por medio de la diligencia y la atención a las empresas, se esfuerza por eliminar todas las fuentes de error para que los resultados de su la acción no se ve perjudicada por la ignorancia, el abandono, los errores y cosas por el estilo«.

Sin embargo, Mises continuó: «No escapó ni a los economistas clásicos que el individuo economizante como parte del comercio no siempre y no siempre puede permanecer fiel a los principios que gobiernan al empresario, que no es omnisciente, que puede errar, y que, bajo ciertas condiciones, incluso prefiere su comodidad a un negocio con fines de lucro».

El Estado y sus presupuestos, la deuda y la intrusión no han hecho más que crecer bajo el liderazgo de los Boomers, a pesar de que el capítulo de Gibney reflexiona sobre las filosofías del libre mercado.

El autor dice que los Boomers no ahorran lo suficiente, mientras abortan, se divorcian y comen demasiado. Los Boomers causaron; alta inflación, delincuencia, bajos estándares educativos, el establecimiento de tasas impositivas corporativas, la contratación de profesores adjuntos, que no reemplazan la infraestructura en ruinas, y evitan cumplir con su deber de guerra.

Resume que «la idea de los Boomers como buena gente es absurda» y «Los Boomers merecen el descontento de Estados Unidos y deberían pagar lo que puedan». Lo que más desea el autor es que los Boomers paguen impuestos más altos.

Irónicamente, en sus días de fondos de cobertura, Gibney trabajó para Peter Thiel, quien, por casualidad, tiene más que un interés pasajero en el trabajo de Hans-Hermann Hoppe. En lugar de culpar a los Boomers por todos los males sociales de Estados Unidos, Hoppe culpa a la democracia y al aumento de la preferencia temporal de la sociedad en su libro Democracia: El Dios que falló.

Los impuestos del Estado a la impunidad, violando los derechos de propiedad de sus ciudadanos, «afectan las preferencias individuales de tiempo de manera sistemática y mucho más profundamente que el crimen«, escribe Hoppe, explicando que las futuras violaciones de los derechos de propiedad se institucionalizarán.

En lugar de una preferencia de tiempo de caída de la sociedad, la intrusión del Estado provoca una mayor preferencia de tiempo. En lugar de ahorros, formación de capital y creciente civilización, el proceso se «invierte por una tendencia a la deconstrucción de la civilización (decivilización): los proveedores de servicios anteriores se convertirán en borrachos o soñadores, adultos en niños, hombres civilizados en bárbaros y productores en delincuentes«.

No todos los Estados se «decivilizan» por igual, señala Hoppe. La democracia, con su cambio constante de gobierno, tiene un presidente que no posee el valor del capital de los recursos del Estado, pero «agotará la mayor cantidad de recursos del Estado lo más rápido posible, por lo que no consume ahora, él Tal vez nunca pueda consumir«, escribe el profesor Hoppe. «Para un presidente, a diferencia de un rey, la moderación solo ofrece desventajas».

La ilusión de democracia, de que el Estado somos nosotros, significa que «la resistencia pública contra el poder del Estado se debilita sistemáticamente».

Entonces, ¿qué ha causado la desaparición de Estados Unidos: el Dr. Spock, la televisión y los Boomers, o fue la democracia?

Tomaré el argumento de Hoppe sobre el de Gibney. Sin embargo, sólo soy un humilde Boomer.

 

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©Douglas French is former president of the Mises Institute, author of Early Speculative Bubbles & Increases in the Money Supply , and author of Walk Away: The Rise and Fall of the Home-Ownership Myth. He received his master’s degree in economics from UNLV, studying under both Professor Murray Rothbard and Professor Hans-Hermann Hoppe.

© Mises Wire

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Matrimonio homosexual: Propuesta ¿cristiana? de modificar el artículo constitucional (2)

Sociedad / Articulo de opinión 

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¿Por qué votaría alguien por su propia esclavización y la de sus prójimos?

 

Cubamatinal / Sería provechoso si reflexionáramos cuánto han degradado a los cubanos casi sesenta años de dictadura y de la mentalidad de supervivencia.

Por Jaime Leygonier.

La Habana, de octubre, 2018/. Votar por el totalitarismo para que nuestros amos nos exhiban como esclavos felices, no es de cristianos y ni siquiera de personas serias.

¿Amén al comunismo eterno, ¡aleluya!, ¡Vivan las cadenas! Ya voté como todo un “doble
moral” que sabe vivir, no soy bobo, “quien se mete a redentor sale crucificado” y ahora me voy a mi iglesia a cantar en el coro?

¿Por qué votaría alguien por su propia esclavización y la de sus prójimos?

Sería provechoso si reflexionamos cuánto han degradado a los cubanos casi sesenta años de dictadura y de la mentalidad de supervivencia que hace renunciar a obrar según la conciencia.

Mentalidad que determina a la Iglesia, lejos de influir la Iglesia en la sociedad. Quien educa a sus niños en la religión cristiana, suele enseñarlos a hacer un análisis de conciencia antes de dormir, entrenándolos para analizar por si mismos su conducta y acciones, según juicios de valor entre el bien y el mal.

Hábitos que con los años los ayudarán a no caer en pecado o a levantarse cuando caigan.
Estudios psicológicos sostienen que los criminales suelen ser maestros en la autojustificación y en engañarse a sí mismos con expulsar de su conciencia aquellos pensamientos y recuerdos que contradicen su autojustificación (Samuel Yochelson y Stanton Samenow). Si eso ocurre con los criminales: ¿Qué queda para las personas decentes que le dan importancia a verse a sí mismos como cristianos, pero obran en contra de la moral cristiana mientras “diezman la menta y la ruda”?

¿Y los que se sentirían enfermos y en pecado de juicio temerario si pensaran que su sonriente pastor es un mercenario incapaz de “dar su vida por las ovejas” y que la alta directiva de su  amada Iglesia “se prostituye con los príncipes de la tierra”? (aquí mismo me dejará de leer y se refugiará en la negación).

¿Tiemblan los cristianos cubanos por el sentido de la responsabilidad de no cumplir sus
deberes para con Dios y para con sus prójimos o gozan de un adelanto del cielo proporcionado por un cristianismo “pop”, “light”; acolchado para que todos se sientan cómodos y salvos solamente por participar los domingos de un agradable show musical y oratorio?

El camino fácil, amplio, sin espinas, sin la cruz de los seguidores de Cristo, camino al que los guía amablemente algún pastor que jamás los hace cuestionarse a sí mismos, a su conciencia (y menos cuestionarlo a él) si viven según la Ley de Dios, que nos obliga al camino estrecho, que no nos conviene “según la sabiduría del Mundo”, pero que es el único.

Con ese entrenamiento en la tibieza y la alienación de la sociedad en que nos tocó vivir: Si las autoridades anticristianas retiraran “el permiso” para ser cristianos sin ser perseguidos, ¿cuántos quedarían en la Iglesia? (pastores incluidos).

Y “el permiso” lo dio el Ilusionista en Jefe, cuando vio su provecho en ello y que podía utilizar y hacer sumisas a las iglesias y corromperlas con el control estatal de donaciones, viajecitos de pastores y ponerle agentes en la directiva.

Ahora usted me protesta, se siente dolido: “Eso pasará con otra iglesia, con la mía, no”.
Parecido a ese sarcasmo italiano de: “Todas las mujeres son –malas- salvo la mía mama que es una santa”.

“Se equivoca, Jaime, calumnia, ataca a la Iglesia. Mis pastores luchan titánicamente contra las presiones del Gobierno. No soy testigo de ello, pero se los he oído, aunque no dan detalles.

Léase: “Dios no entra en mi oficina”.

Y ¿por qué quiere creer eso? Si creyera lo opuesto se sentiría muy mal y obligado a acciones dolorosas que no desea obrar. ¿Ya se leyó: “Entré en el seminario con dos camisas de guajirito, tierra colorada en los dedos de los pies y ahora tengo una casona, un maquinón, mi “primera dama” viste como una reina, viajo a cada rato y preparo a mis hijos para continuar el negocio familiar?

Ni lo leyó ni lo va a leer, nunca lo escribirán.

¡Protésteme!: “Yo soy bueno, no tengo culpa de lo que pasa, no puedo solucionarlo”. ¿De verdad hace todo lo que puede o se acomodó a no hacer nada a no arriesgar nada por la sociedad en que vive, porque a usted no le va tan mal con el envío de la remesa familiar o con un negocio ilegal?

Recuerde la doctrina de la culpa colectiva. Lea en el Antiguo Testamento como cuando ocurría algún gran pecado, todo el pueblo de Dios, en lugar de decir: “Yo no soy”, vestía cilicio, se echaba ceniza sobre la cabeza y ayunaba pidiendo perdón.

Cuba, está llena de pecado, miseria, ancianos y niños hambreados y desatendidos, pesas
adulteradas, salarios defraudados y que no alcanzan para alimentarse una semana, hospitales y ancianatos donde ocurren horrores, prisiones inhumanas y mucha brujería, a la cual contribuye el pobre testimonio cristiano y ¿alguna iglesia hace ese tipo de penitencia?

Se limitan a expender entretenimiento ligero y: “Yo no soy, hago lo que puedo”.
Muchos pastores hasta tergiversan la Palabra de Dios, usando incompleta la cita de Pablo de que debemos estar sumisos a la autoridad (léala entera).

Y ahora, si votan en el fingido referéndum por la fingida Constitución, votarán contra la Ley de Dios, soliciten o no la modificación del “matrimonio” homosexual.

La votación será secreta; pero la gente se engaña con el absurdo, por miedo cerval o echado a rodar por el Gobierno, de que sabrán quien votó en contra: “Las boletas están numeradas”.

”Tienen una cámara oculta en el cuchitril”. Paranoias de alma de esclavo.

El pecador encuentra su castigo en el pecado. Y el pecado colectivo de este pueblo autoengañado, esperando que Fidel Castro o el Papa o el Gobierno español, u Obama o, ¡hasta le dejan el asunto a Dios, siendo asunto de cada uno!, otro cualquiera, les arregle a Cuba, para no obrar personalmente. Y todos estamos en culpa.

Ese pecado trae la consecuencia de la eternización de la Dictadura y de su posible final sangriento, como en Rumania; cuando el grado de calamidad empuje a la gente a la calle a matar «Ceausescus» y a saquear las lujosas casas de los hombres de iglesia.


 

2) Portal de Diez de Octubre 818, año 2013 - Foto J. Leygonier.

Periodista independiente, con una amplia producción en diferentes medios de la prensa independiente y el exilio. Escritor, ex profesor (expulsado por sus acciones políticas), fue condenado a tres años de privación de libertad en 1990 por el supuesto delito de “propaganda enemiga”, con anterioridad expulsado de la carrera de Historia en la Universidad de La Habana por no renegar del catolicismo.

Reside en Cuba y se mantiene activo en la prensa independiente, incluido el periodismo de investigación.

© Jaime Leygonier

© Cubamatinal

El Sistema de Salud en Brasil

Economía/ Economía Política de la Salud

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Cubamatinal / En 2018, el sistema público de salud de Brasil completará 30 años. Es considerado uno de los mayores del mundo y regularmente presentado por garantizar el acceso integral, universal e igualitario a la población. Sin embargo, hace falta recorrer la otra parte del camino, ya que presenta desafíos en su presupuesto y en su gestión que lo distancian de alcanzar esas garantías.

Pero, ¿cuál fue la novedad planteada?

Por Evelise Pereira Barboza

La creación del Sistema Único de Salud (SUS) fue un hito en la historia de la salud pública brasileña del siglo XX. Instituido en 1988 por la Constitución del país, trata la salud por su primera vez como “derecho de todos y deber del Estado”. Toda la población pasa a tener derecho a la salud gratuita, financiada con recursos de la Federación, de los Estados, del Distrito Federal y de los Municipios.

Antes de su implantación, la asistencia médico-hospitalaria era desarrollada por el Instituto Nacional de Asistencia Médica de la Previdencia Social – INAMPS. O sea, la salud era derecho solo para trabajadores formales y sus dependientes. Los demás no tenían acceso a los servicios de salud y eran considerados “indigentes”. La salud se centraba en la asistencia curativa y el combate de endemias, y la prevención de las enfermedades estaba a cargo del Ministerio de la Salud, con un presupuesto mínimo.

En los años 70, se llevó a cabo el Movimiento de la Reforma Sanitaria con la participación de la sociedad y profesionales de la salud, que buscaba el fin de la privatización de la asistencia a la salud. Con el final de la dictadura en Brasil y su nueva Constitución, el SUS empieza a ser implantado: inicialmente la universalización de la atención, después el INAMPS fue incorporado el Ministerio de la Salud, y finalmente la Ley de la Salud. Sus principios diferenciaban de la salud desarrollada hasta el momento en el país:

  • Universalidad: trata de atender a todos y proporcionar todos los procedimientos necesarios.
  • Integralidad: trata el individuo como ser único (no partes) y considera los diferentes aspectos de su salud; además, considera que los servicios de la salud deben actuar de manera integrada.
  • Equidad: es la igualdad sumada a la justicia para tratar diferente a los diferentes e igual a los iguales, según sus necesidades.
  • Descentralización: garantizar que el planeamiento y la gestión del SUS sean hechos de manera complementaria en niveles distintos y que haya cobertura de centros de salud en todo el país.
  • Participación social: en la gestión del servicio, una de sus principales características, como respuesta al Movimiento de la Reforma Sanitaria.

Un largo camino a recorrer…

La población brasileña es de cerca de 200 millones de personas y la gran mayoría depende únicamente del SUS para acceder a servicios de salud. Sin dudas, esta es la más grande política de inclusión social de Brasil y presenta números importantes.

Solo en 2014, por ejemplo, fueron realizados:

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Como logro, se puede añadir la descentralización del sistema de la salud, en que los estados y los municipios pueden planear sus acciones de manera distinta en los territorios. Asi, el uso de los recursos para las acciones locales en la atención primaria puede facilitar la reducción de gastos con especialidades sin necesidad.

Sin embargo, el SUS tiene algunos grandes desafíos a superar. Presento aquí tres de ellos…

El primero, es la organización económica, tanto federal como local, y su financiamiento para que la “universalidad”propuesta sea realmente alcanzada. Por los recursos escasos y por como son gastos estos recursos, el Sistema no da abasto para atender a todas las personas que se propone en la manera que necesitan. Una vez adentro del sistema, las personas dicen que la calidad de la atención y de los procedimientos es muy buena. Pero, por los problemas de financiamiento, muchos usuarios tardan en tener el acceso y esa es su mayor crítica. Hay que tener más recursos humanos y de materiales, desde la atención primaria hasta la terciaria.

El segundo, la propia fortaleza de la descentralización. Aunque sea una propuesta muy evolutiva para la construcción de una política democrática, es necesario que el sistema esté ordenado en redes bien estructuradas, las que llamamos RAS (Redes de Atención a la Salud). Para que el sistema funcione como se propone, esas redes pueden fortalecer la priorización de la atención primaria y, desde ella, tratar las atenciones secundarias y terciarias de manera integrada. Las redes pueden ayudar a superar la fragmentación actual del sistema. Las demandas de salud surgen muy rápidamente hoy en día y con el sistema fragmentado poco se puede hacer con calidad y rapidez.

Y, por último, convivir con el modelo privado “hospitalocéntrico”, que busca el lucro con la salud de sus “clientes” y acaba por desmoralizar el SUS y sus avances, además de reforzar sus dificultades en la salud individual y especializada, en contraposición a la salud colectiva.

El SUS desde su creación ha pasado por distintos momentos de caída y ascensión y las consecuencias de eso son observadas en sus fortalezas y desafíos. Para que los problemas que persisten en estos casi 30 años sean solucionados, el mejor camino es el mismo de su inicio: las personas. La participación popular efectiva, en todos los niveles de la gestión, es la clave para un sistema que además de grande sea realmente de todos.

 


Autora: 

evelice pererira

©Evelise Pereira Barboza

© Blog Master de Salud Pública


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La marcha del Brasil hacia la cobertura universal

La reforma histórica realizada por el Brasil en 1988 ha permitido que millones de personas obtuvieran cobertura sanitaria, pero el sistema carece de fondos suficientes, según informan Claudia Jurberg y Humphreys Gary en una serie sobre la financiación de la salud.

En 1988, la mitad de la población del Brasil carecía de cobertura sanitaria. Transcurridas dos décadas desde que estableció su Sistema Único de Salud (Sistema Único de Saúde), más del 75% de los casi 190 millones de habitantes que se estima que tiene el país dependen exclusivamente de él para su atención médica.

Una de las beneficiarias es Marlene Miranda da Cruz, de 44 años de edad, que vive en la favela Manguinhos de Río de Janeiro y recibe asistencia a través del Programa de Salud de la Familia (Programa de Saúde da Família).

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Da Cruz es una de las 35 000 personas atendidas por la clínica de Manguinhos, que está a cargo de 11 equipos de profesionales sanitarios, entre ellos médicos, enfermeras, odontólogos y agentes comunitarios. «Al final del año habrá 16 equipos para atender a 45 000 residentes de Manguinhos», señala Alex Simões de Melo, director gerente de la clínica.

El Programa de Salud de la Familia, que cubre a unos 97 millones de brasileños, es un componente clave del Sistema Único de Salud. Emplea a más de 30 000 equipos de profesionales sanitarios que trabajan de forma concertada para llegar a las comunidades pobres y aisladas del país.

Además de ofrecer atención primaria gratuita en el punto de servicio, principalmente a través del Programa de Salud de la Familia, el Sistema Único de Salud ofrece una amplia gama de servicios hospitalarios, entre ellos cirugía cardiaca, imaginología médica avanzada y diagnóstico de laboratorio. Además da apoyo a un robusto programa de vacunación, campañas de prevención, atención odontológica básica y una subvención del 90% de muchos medicamentos esenciales.

La descentralización ha jugado un papel fundamental en la reforma de la financiación sanitaria en el Brasil. En 1996 se transfirió por ley una parte de las competencias de gestión y financiación de la atención sanitaria a los 26 estados del país y a más de 5000 ayuntamientos. Los estados están obligados a destinar un mínimo del 12% del presupuesto total a la salud, y los ayuntamientos deben invertir el 15% de su presupuesto en salud. El gobierno federal también aporta dinero recaudado a partir de los impuestos. A nivel municipal este sistema parece funcionar bien: el 98% de los municipios cumplen el requisito del 15% del presupuesto y algunos gastan más del 30%, según Antônio Carlos Nardi, Secretario de Salud y presidente del Consejo Nacional de Secretarios de Salud (Conselho Nacional de Secretários de Saúde).

«Las comunidades participan activamente en las decisiones sobre los presupuestos municipales», dice la profesora Sulamis Daim, de la Universidad del Estado de Río de Janeiro.

«El municipio de Maringá brinda un ejemplo muy destacado de participación popular», dice Nardi, pues la comunidad «participa en debates en el ayuntamiento, en los procesos de asignación de presupuestos, en la supervisión de las cuentas y en la aprobación de los informes de gestión anuales.» El municipio de Maringá, a 400 km al oeste de Sao Paulo, en el estado de Paraná, ha destinado más del 20% del presupuesto total a la salud en los últimos seis años, muy por encima del 15% requerido.

Este tipo de compromiso es menos patente en el ámbito estatal, pues más de la mitad de los 26 estados no cumplen la meta de financiación del 12%. «Una de las deficiencias de este sistema es que el concepto de gasto en salud es muy amplio», dice el Dr. Francisco de Campos, secretario nacional de la Secretaría de Recursos Humanos para la Salud del Ministerio de Salud. «Algunos estados han destinado el dinero a medidas de saneamiento o a seguros médicos complementarios para funcionarios públicos. Aunque esto puede repercutir indirectamente en la salud de la población, debemos definir con mayor precisión los gastos de salud. «

A nivel federal, el principal problema es la falta de fondos. Según las Estadísticas Sanitarias Mundiales 2010 publicadas por la Organización Mundial de la Salud (OMS), el gasto en salud por habitante del Gobierno del Brasil en 2007 fue de US$ 252, por detrás de países vecinos como la Argentina, US$ 336, y el Uruguay, US$ 431. Según el Dr. Gilson Carvalho, asesor del Consejo Nacional de Secretarios Municipales de Salud, se necesitan fondos públicos por valor de alrededor de US$ 73 000 millones para sostener el amplio sistema de cobertura universal del Brasil. Se desprende de ello que el Gobierno debería gastar más de US$ 100 dólares adicionales por persona que en la actualidad.

En 1996, el Gobierno federal introdujo un impuesto sobre las transacciones financieras específicamente para financiar la salud, lo cual permitió recaudar en 2007 unos US$ 20 000 millones aproximadamente. Sin embargo, el impuesto fue finalmente eliminado debido a la preocupación suscitada por la excesiva carga fiscal y a la sospecha de que los fondos no se estaban dedicando por entero a atención médica según lo previsto. «Eso provocó de inmediato una caída de los ingresos del Ministerio de Salud», dice de Campos.

José Noroña, ex secretario de Salud tanto en Río de Janeiro como en el Ministerio de Salud, señala que: «Si el presupuesto del Ministerio de Salud se basara todavía en la legislación de 1988, sería más del doble de lo que es hoy».

En la reforma constitucional de 1988 que estableció el Sistema Único de Salud se determinó que el 30% del presupuesto destinado a la seguridad social se dedicaría a la salud. «Si el 30% del presupuesto de la seguridad social se hubiese dedicado realmente a atención sanitaria en los últimos 20 años del Sistema Único de Salud, estaríamos en la senda del tipo de sistema público integral en vigor en Europa y el Canadá, en consonancia con los principios una cobertura universal, equitativa y con participación social en la financiación», señala Nelson Rodrigues dos Santos, presidente del Instituto de Derechos de Salud (Instituto de Direito Sanitário Aplicado).

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Pacientes recibiendo tratamiento en el servicio de urgencias de Manguinhos

Daim, de la universidad del Estado de Río de Janeiro, percibe también una falta de compromiso por parte del gobierno federal, que según ella repercute de forma directa en el Sistema Único de Salud. «Hoy día se observa una disminución importante del porcentaje del gasto federal dedicado a la salud en comparación con los ingresos fiscales. Desde que se creó el Sistema Único de Salud, la falta de fondos ha impedido realizar inversiones para ampliar la oferta de servicios y ha frenado las remuneraciones por servicios y procedimientos», señala.

Esa financiación insuficiente se asocia a problemas de deterioro de la infraestructura sanitaria básica y de escasez de personal de hospital. Muchos pacientes, en lugar de acceder a los servicios de atención primaria, solo entran en contacto con el sistema de salud en el último momento, a veces a través de los servicios de urgencias hospitalarios. «El resultado son unos servicios saturados, con largas colas y listas de espera», dice dos Santos.

No es sorprendente que muchos brasileños opten por el sector privado para evitar ese tipo de retrasos y frustraciones. El Brasil ha implantado un sistema de dos niveles, que ofrece a empresas y particulares la posibilidad de comprar servicios de salud a través de aseguradoras privadas reguladas por la Agencia Nacional de Salud Suplementaria (Agência Nacional de Saúde Suplementar). Las personas que contratan seguros privados se benefician de una desgravación fiscal, pero así y todo tienen que contribuir al Sistema Único de Salud mediante sus impuestos sobre los ingresos. El porcentaje de personas que cotizan en seguros privados ha aumentado desde 1988, y el año pasado más del 20% de la población optó por una cobertura privada. Huelga señalar que esta opción solo está al alcance de las personas con ingresos más altos; los más pobres deben conformarse con el Sistema Único de Salud.

A pesar de los problemas de financiación, el Brasil ha registrado mejoras significativas en sus resultados sanitarios. «La descentralización, el énfasis en la atención primaria y el establecimiento de transferencias automáticas de fondos federales a los municipios han repercutido de forma importante en los indicadores sanitarios», afirma Noronha. La mortalidad de lactantes ha disminuido de 46 por 1000 nacidos vivos en 1990 a 18 por 1000 nacidos vivos en 2008. La esperanza de vida al nacer para ambos sexos también ha aumentado de 67 años en 1990 a alrededor de 73 años en 2008. Las desigualdades regionales también han disminuido; por ejemplo, la diferencia entre la esperanza de vida al nacer en el noreste del país y en la parte sur, más rica, era de ocho años en 1990, pero esa brecha se ha estrechado, pasando a ser de cinco años en 2007.

«El Brasil ha hecho enormes progresos, pero todavía queda mucho por hacer», dice de Campos. «Necesitamos a la vez experiencia de gestión y dinero. Si nos limitamos a inyectar más dinero en el sistema sin controlar los gastos, eso no redundará necesariamente en mejoras de los servicios.»

© Claudia Jurberg y Humphreys Gary

© Boletin OMS

A sus 99 años, aristócrata cubana logra la ciudadanía española y el título de marquesa

Otros temas de interés / Maria Elena de Cárdenas lleva radicada en Miami desde hace 58 años

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Dña. Maria Elena de Cárdenas Cruz

Cubamatinal/ Según reportaje de Cubanet, la aristócrata cubana María Elena de Cárdenas, cuyo nombre saltó a los medios españoles por su pleito por un título nobiliario en poder de la empresaria Alicia Koplowitz, se acerca a sus 99 años lúcida, cantarina y satisfecha de haber logrado la nacionalidad española y el marquesado de Almendares.

 

España, 5 de julio de 2018/ Cubanet-Agencias /Este jueves 5 de julio, “si Dios quiere”, su familia festejará el cumpleaños de “Manana”, como todos la llaman, en una reunión en su casa de Coral Gables, una zona residencial del condado de Miami-Dade que se distingue por sus viviendas de aire español y sus calles con nombres como Granada, Valencia, Alhambra o Sevilla.

Además de su familia más cercana asistirá a la fiesta un pianista amigo para interpretar las canciones que le gusta cantar a “Manana”, quien este año ha recibido por adelantado dos alegrías, de las cuales está “muy feliz”, dice su hijo, Luis de la Vega.

El Tribunal Supremo de España dictó sentencia firme hace unos meses a favor de “Manana” en el pleito por el marquesado de Almendares con Miguel Mariano Freire Gómez, nieto de un presidente de Cuba, pero su mayor orgullo no es el haber recuperado uno de los títulos nobiliarios que su padre siempre deseó que volvieran a la familia.

La gran satisfacción de esta habanera radicada en Miami desde hace 58 años es haber cumplido su propio sueño de tener la nacionalidad española, según dice en una declaración enviada a Efe.

El nombre de “Manana” apareció el año pasado en los medios españoles por haberle disputado judicialmente el título de marquesa de Bellavista a la empresaria Alicia Koplowitz, una de las mujeres más ricas de España, que lo llevaba hasta entonces.

Ese pleito y otro interpuesto contra la sobrina de la empresaria, Alicia Alcocer Koplowitz, en este caso por el marquesado de Campoflorido, iniciado a la vez que el que acaba de ganar definitivamente, aún están por resolver.

Koplowitz ha recurrido la sentencia de primera instancia referida a Bellavista y Alcocer la de apelación por Campoflorido.

En ambos casos lo jueces establecieron el “mejor derecho” de la nonagenaria cubana a ambos títulos.

No es que “Manana” y su familia hubieran perdido los títulos que a partir de 2014 reclamaron, sino que estuvieron inactivos mucho tiempo debido a las circunstancias por las que atravesaron ellos y otros miles de cubanos en la segunda mitad del siglo XX debido a la Revolución encabezada en 1959 por Fidel Castro.

Otras personas los reclamaron mientras ella, su esposo y su hijo trataban de rehacer desde “cero” su vida en un nuevo país.

María Elena de Cárdenas, descendiente de una familia llegada a Cuba en el siglo XVI, se muestra muy agradecida con la Justicia española por haber atendido su caso y ha pedido al rey Felipe VI que que expida a su favor “Real Carta” de sucesión en el marquesado de Almendares.

La recuperación de los títulos familiares era un anhelo de su padre y ella se sentía responsable ante él y ante su hijo y nietos de dar cumplimiento a sus deseos, señala.

A punto de cumplir 99 años, “Manana”, que cuando era niña le decía a su madre que quería ser sevillana como ella, ya es española por sus vínculos de sangre.

Dice que su familia tanto en Cuba como en Miami, nunca dejó de sentirse española. “Muchos españoles -dice- no son conscientes de la suerte que tienen de pertenecer a una nación generosa y comprometida como pocas, donde sus gentes son tan encantadoras y la calidad de vida incomparable”.

Ahora que es española, se decide a dar su opinión sobre el “problema catalán”.

“Manana” no entiende que “una parte de los catalanes quieran dejar de ser también españoles, cuando tienen la gran dicha de poder ser las dos cosas al mismo tiempo” y considera “triste e innecesaria” la división y malestar generados.

“A mis años se ven las cosas de otra forma y pienso que los sentimientos de fraternidad y unión entre pueblos son más nobles y constructivos que los de división y odio”, subraya.

Sus consejos para las generaciones que vienen detrás de ella son: “que sientan siempre la alegría de vivir, que estén conformes con lo que tienen, que tengan aspiraciones que sean posibles y que quieran mucho al Señor”.


 © Agencias

© Cubanet

Carta abierta: Segundo reclamo de feligrés al Nuncio Apostólico en La Habana

Derecho / Derecho Canónigo

codigo de derecho canonico

Cubamatinal/ En ediciones anteriores, hemos publicado diferentes artículos del feligrés de la parroquia El Buen Pastor de Jesús del Monte en el municipio capitalino “10 de Octubre”, reclamando a la iglesia la rectificación publica de las ofensas emitidas contra diferentes estamentos de la sociedad civil cubana en un numero de la publicación jesuita “Vida Cristiana”. Luego de varios desencuentros y omisiones sobre el reclamo; el feligrés Jaime Leygonier, dirigió una carta al Nuncio de la Santa Sede en La Habana. Ante el silencio del Nuncio, envía una segunda carta reclamando el derecho de acudir al Papa en demanda legal como establece el  Derecho Canónigo. A continuación el texto de la nueva carta y copia de la primera.

Texto de la carta: 

La Habana, 21 de junio, 2018.

Excelentísimo Señor Nuncio de la Santa Sede en La Habana.

La S. E.R., arzobispo Georgio Lingua:

Hace meses le escribí la carta que abajo reenvío, sin respuesta aun de S.E.R. Se suma S.E.R. a la negación a un católico cubano de su derecho a acudir en demanda a S.S. el papa Francisco, derecho prescripto por el Código de Derecho Canónico?

Apoya a los pastores cubanos que incurren en esa violación de derecho. con  negarse también a aplicar  el Derecho Canónico, con el método del silencio, de ignorar a quienes se quejan , que tantos escándalos y desprestigio han traído a la Iglesia,  negativa que significa abuso de autoridad, contra las leyes que otorgan esa autoridad?

Porque, como Nuncio, lo hace en nombre de S.S. el papa Francisco.

Insisto en mi derecho a acudir al Papa en demanda legal y espero me responda. El corrupto y pagano pretor Felix, otorgo ese derecho, su precedente, a Pablo de Tarso, para que acudiera ante el monstruoso emperador Tiberio.

Espero que la Iglesia, hoy, no sea peor y S.E.R., facilite mi demanda.

Jaime Leygonier Fdez. Feligrés de Jesús del Monte.(Ya tiene mi dirección y teléfono abajo se repite).


Primera carta:

Excelentísimo Señor Nuncio de la Santa Sede en La Habana.

S. E.R., arzobispo Georgio Lingua:

Por mi carta e-mail del 15 de marzo pasado y otra posterior, en las cuales le solicité interpusiera sus buenos oficios, para lograr una avenencia en asunto de “difamación mediante libelo”, conoce que hace meses solicito una rectificación a la cual se niegan las autoridades de la Iglesia a quienes compete.

S.E.R., conoce, que vista la obstinación en negarse a la avenencia fraterna, pedí a esas autoridades un juicio eclesiástico contra el, o los implicados, según Derecho Penal Canónico. Y que me orientaran, sobre como presentarles mi demanda judicial.

Pero prosiguen obstinados en su negativa, mediante el expediente infantil de no responder mis cartas de petición, privadas y públicas, de las cuales no pueden negar conocimiento.

Ello va contra el Derecho Canónico. Contra mi derecho a presentar la demanda, que mi Iglesia me otorga mediante ese código legal. Contra el voto de obediencia a la autoridad superior, pues fue el Papa (S.S. Juan Pablo II) quien refrendó el Código de Derecho Canónico vigente.

Y contra el deber que tienen el Superior de los Jesuitas, R.P. Juan Miguel Arregui; el Arzobispo de La Habana, S.E.R. Juan de la Caridad García Rodríguez; y los obispos de la Conferencia de Obispos Católicos de Cuba (C.O.C.C.) de velar porque los religiosos subordinados a ellos o en su diócesis, o en las diócesis donde repartieron el libelo, no den escándalo y, en caso de delinquir, sean castigados según justicia.

Justicia que me asiste, según reconoce implícitamente tanto ignorar mi demanda: Pues si mi denuncia fuera injusta, la autoridad eclesiástica, en este caso el Superior de la Compañía de Jesús y el Arzobispo de La Habana, estarían igualmente en deber de recibirla.

Y, luego de recibirla, desestimarla como infundada por motivos legales que me explicarían.

No me sorprende, pues hace años fue en vano denunciarles al arzobispo de La Habana, S.E.R. Juan de la C. García Rodríguez y a su predecesor, el cardenal Jaime Ortega:

Los robos del párroco Luis Alberto Formoso, los mecanismos de secta de la parroquia de La Medalla Milagrosa.

Precedente acto de “difamación mediante libelo”, cometido por el arzobispo de Pinar del Rio, Mons. E. Serpa, contra el derecho al buen nombre de los presos de conciencia conocidos como “los 75”. A quienes calumnió, al declarar en la revista “Palabra Nueva”: “algunos eran presos comunes”, sin especificar cuáles ni en que basaba su descalificación.

Cobro de los sacramentos mediante tarifa; posible violación del secreto de la confesión, etc.

Dado que la arbitrariedad y la impunidad imperan en Cuba y los príncipes de mi Iglesia parece las consideran “principios” y desprecian no solamente las peticiones, sino al Código de Derecho Canónico al que deben obediencia:

Acudo a Su Excelencia Reverendísima, y como a Nuncio, representante de la autoridad papal, le ruego tenga a bien citarme para tramitar mi demanda legal a Roma, contra el señor cura Eduardo García Tamayo, S. J., director de la publicación jesuita “Vida Cristiana”.

Demanda por “injurias y difamación mediante libelo” contra colectivos sociales de cubanos. Con uso de la propaganda de odio oficial, en esa publicación católica.

La diferencia entre autoridad y tiranía, la marca la sujeción de la autoridad a la Ley.

El 17 de abril del presente, vino a la puerta de mi hogar un agente de la Seguridad del Estado, “Sección 21 de Enfrentamiento a la Contrarrevolución”. Pretendía “conversar” conmigo sobre mi labor, me negué.

Como escribo muy poco periodismo desde diciembre del 2016 y últimamente casi que mis únicas publicaciones son mis cartas a autoridades de la Iglesia:

Me pregunto si este acto de acoso que coincide con mi demanda a eclesiásticos es casual o si el Estado anticristiano, deviene en defensor represivo del clero a quien censuro. Espero su respuesta y citación.

Le ruego, ya que aquí no veo ni voluntad de solución ni quien pueda servir de juez, siendo todos parte, que remita esta carta a Su santidad el Papa Francisco.

Que Dios lo bendiga.

Y a nuestra Iglesia en descrédito y crisis: Por mentalidad y prácticas, como las que motivan ésta.

Jaime Leygonier Fernández, feligrés de El Buen Pastor de Jesús del Monte.

Tlf. móvil: (53) 52003571. Domicilio: Zapotes 113, Santos Suarez, La Habana. CP- 10500.


Información Vinculada: 


 

2) Portal de Diez de Octubre 818, año 2013 - Foto J. Leygonier.
Jaime Leygonier Fernandez

Periodista independiente, con una amplia producción en diferentes medios de la prensa independiente y el exilio. Escritor, ex profesor (expulsado por sus acciones políticas), fue condenado a tres años de privación de libertad en 1990 por el supuesto delito de “propaganda enemiga”, con anterioridad expulsado de la carrera de Historia en la Universidad de La Habana por no renegar del catolicismo.

Reside en Cuba y se mantiene activo en la prensa independiente, incluido el periodismo de investigación.

Carta abierta al Excelentísimo Señor Nuncio de la Santa Sede en La Habana

Derecho/ Derecho Canónigo 

codigo de derecho canonico
Acudo a Su Excelencia Reverendísima, y como a Nuncio, representante de la autoridad papal, le ruego tenga a bien citarme para tramitar mi demanda legal a Roma, contra el señor cura Eduardo García Tamayo, S. J., director de la publicación jesuita “Vida Cristiana”…

 

Cubamatinal/ En ediciones anteriores, hemos publicado diferentes artículos del feligrés de la parroquia El Buen Pastor de Jesús del Monte en el municipio capitalino «10 de Octubre», reclamando a la iglesia la rectificación publica de las ofensas emitidas contra diferentes estamentos de la sociedad civil cubana en un numero de la publicación jesuita «Vida Cristiana». Luego de varios desencuentros y omisiones sobre el reclamo; el feligrés Jaime Leygonier, dirige la siguiente carta al Nuncio de la Santa Sede en La Habana.    

Texto de la carta:

Excelentísimo Señor Nuncio de la Santa Sede en La Habana.

S. E.R., arzobispo Georgio Lingua:

Por mi carta e-mail del 15 de marzo pasado y otra posterior, en las cuales le solicité interpusiera sus buenos oficios, para lograr una avenencia en asunto de “difamación mediante libelo”, conoce que hace meses solicito una rectificación a la cual se niegan las autoridades de la Iglesia a quienes compete.

S.E.R., conoce, que vista la obstinación en negarse a la avenencia fraterna, pedí a esas autoridades un juicio eclesiástico contra el, o los implicados, según Derecho Penal Canónico. Y que me orientaran, sobre como presentarles mi demanda judicial.

Pero prosiguen obstinados en su negativa, mediante el expediente infantil de no responder mis cartas de petición, privadas y públicas, de las cuales no pueden negar conocimiento.

Ello va contra el Derecho Canónico. Contra mi derecho a presentar la demanda, que mi Iglesia me otorga mediante ese código legal. Contra el voto de obediencia a la autoridad superior, pues fue el Papa (S.S. Juan Pablo II) quien refrendó el Código de Derecho Canónico vigente.

Y contra el deber que tienen el Superior de los Jesuitas, R.P. Juan Miguel Arregui; el Arzobispo de La Habana, S.E.R. Juan de la Caridad García Rodríguez; y los obispos de la Conferencia de Obispos Católicos de Cuba (C.O.C.C.) de velar porque los religiosos subordinados a ellos o en su diócesis, o en las diócesis donde repartieron el libelo, no den escándalo y, en caso de delinquir, sean castigados según justicia.

Justicia que me asiste, según reconoce implícitamente tanto ignorar mi demanda: Pues si mi denuncia fuera injusta, la autoridad eclesiástica, en este caso el Superior de la Compañía de Jesús y el Arzobispo de La Habana, estarían igualmente en deber de recibirla.

Y, luego de recibirla, desestimarla como infundada por motivos legales que me explicarían.

No me sorprende, pues hace años fue en vano denunciarles al arzobispo de La Habana, S.E.R. Juan de la C. García Rodríguez y a su predecesor, el cardenal Jaime Ortega:

Los robos del párroco Luis Alberto Formoso, los mecanismos de secta de la parroquia de La Medalla Milagrosa.

Precedente acto de “difamación mediante libelo”, cometido por el arzobispo de Pinar del Rio, Mons. E. Serpa, contra el derecho al buen nombre de los presos de conciencia conocidos como “los 75”. A quienes calumnió, al declarar en la revista “Palabra Nueva”: “algunos eran presos comunes”, sin especificar cuáles ni en que basaba su descalificación.

Cobro de los sacramentos mediante tarifa; posible violación del secreto de la confesión, etc.

Dado que la arbitrariedad y la impunidad imperan en Cuba y los príncipes de mi Iglesia parece las consideran “principios” y desprecian no solamente las peticiones, sino al Código de Derecho Canónico al que deben obediencia:

Acudo a Su Excelencia Reverendísima, y como a Nuncio, representante de la autoridad papal, le ruego tenga a bien citarme para tramitar mi demanda legal a Roma, contra el señor cura Eduardo García Tamayo, S. J., director de la publicación jesuita “Vida Cristiana”.

Demanda por “injurias y difamación mediante libelo” contra colectivos sociales de cubanos. Con uso de la propaganda de odio oficial, en esa publicación católica.

La diferencia entre autoridad y tiranía, la marca la sujeción de la autoridad a la Ley.

El 17 de abril del presente, vino a la puerta de mi hogar un agente de la Seguridad del Estado, “Sección 21 de Enfrentamiento a la Contrarrevolución”. Pretendía “conversar” conmigo sobre mi labor, me negué.

Como escribo muy poco periodismo desde diciembre del 2016 y últimamente casi que mis únicas publicaciones son mis cartas a autoridades de la Iglesia:

Me pregunto si este acto de acoso que coincide con mi demanda a eclesiásticos es casual o si el Estado anticristiano, deviene en defensor represivo del clero a quien censuro. Espero su respuesta y citación.

Le ruego, ya que aquí no veo ni voluntad de solución ni quien pueda servir de juez, siendo todos parte, que remita esta carta a Su santidad el Papa Francisco.

Que Dios lo bendiga.

Y a nuestra Iglesia en descrédito y crisis: Por mentalidad y prácticas, como las que motivan ésta.

Jaime Leygonier Fernández, feligrés de El Buen Pastor de Jesús del Monte.

Tlf. móvil: (53) 52003571. Domicilio: Zapotes 113, Santos Suarez, La Habana. CP- 10500.


2) Portal de Diez de Octubre 818, año 2013 - Foto J. Leygonier.
Jaime Leygonier Fernandez.  

Periodista independiente, con una amplia producción en diferentes medios de la prensa independiente y el exilio. Escritor, ex profesor (expulsado por sus acciones políticas), fue condenado a tres años de privación de libertad en 1990 por el supuesto delito de “propaganda enemiga”, con anterioridad expulsado de la carrera de Historia en la Universidad de La Habana por no renegar del catolicismo.

Reside en Cuba y se mantiene activo en la prensa independiente, incluido el periodismo de investigación.

Publicación católica que difamó a disidentes y emigrados, no rectifica

Opinión / “Vida Cristiana”, no retira lo dicho, pero balbucea “misericordia” para prostitutas y disidentes

del cesar y de dios
«…Entre procurar la Gracia de Dios o la del César…»

Cubamatinal / La publicación católica “Vida Cristiana”, en aparente respuesta a reclamaciones por sus insultos a emigrantes y disidentes cubanos, intentó “arreglarlo”, en su número 2777, del 11 de febrero. De forma indirecta, sin pedir perdón, ni desdecirse, ni reparar el daño a quienes difamó.

Por Jaime Leygonier

La Habana, 13 de febrero, 2018/ Exhortó vagamente a “misericordia” para con “los mal vistos”. Sin emplear la única forma de reparar a los calumniados: Reconocer que no merecen esos insultos, que las descalificaciones que publicó son falsedades.

Coincidentemente, ese domingo 11 de febrero, en las misas de la Arquidiócesis de La Habana, los sacerdotes predicaron sobre ser misericordiosos con los marginados.

“Vida Cristiana”, es una hoja impresa que la Iglesia católica, entrega cada domingo en toda Cuba a los asistentes a misa. La dirigen los jesuitas. Y en su número 2769, difamó a los disidentes y emigrantes cubanos, deshumanizándolos con descalificaciones que ideara Fidel Castro para su propaganda.

Los insultos aparecieron en un comentario contra la política migratoria estadounidense hacia Cuba, bajo el título “El amor todo lo espera” y la firma Julio Pernús. Cito: “/…Como muchos miembros del pueblo cubano tengo familiares allí – en E.E.U.U. – que por cierto no son gusanos, lumpens ni disidentes. Son personas honestas y trabajadoras que decidieron emigrar…/”.

El católico periodista independiente, Dr. René Gómez Manzano, destacó, en “Ni “gusanos ni disidentes”, que esa clasificación segregacionistas, no la utiliza ya desde hace años ni la misma prensa de la Dictadura.

No es mal nuevo: En el 2015, el Arzobispo de Pinar del Río, Mons. Jorge E. Serpa, en la revista del Arzobispado de La Habana, “Palabra Nueva”, difamó mediante libelo a los presos de conciencia conocidos como “los 75”, afirmando, sin argumento alguno: “algunos de ellos no eran presos políticos, sino comunes”.

Y ni Mons. Serpa, ni dos directores de la revista, ni el actual arzobispo de La Habana, Mons. Juan de la C. García Rodríguez, respondieron a reiteradas peticiones de aclaración o de otorgar derecho de réplica.

Sobre la actual difamación a disidentes y emigrados, el director de “Vida Cristiana”, P. Eduardo García Tamayo, s. J., publicó algo que parece ambiguo “soplar en la herida”, el domingo 11 de febrero, sección “De la mesa del Director”, título: “Amigo de mal vistos (Marcos 1, 40-45)”.

Comentario del Evangelio del día: La curación de un leproso por Jesús. Se extendió sobre el rechazo a los leprosos, que el pueblo creía en pecado, y declaró como moraleja:

“La capacidad para descubrir la imagen del Hijo de Dios en los rasgos borrosos del que sufre y es excluido y salir a su rescate es un rasgo distintivo de Jesús. Muchos de los que optaron por seguirlo y vivir a su manera/…/también se acercaron con misericordia más que con temor a los excluidos, infectados, pobres, presos, prostitutas. Cada época produce una nueva cosecha de excluidos: emigrantes, disidentes, independientes…Y cada cosecha de mal vistos requiere una nueva visión misericordiosa de Jesús”.

Lo apropiado tras difamarnos, ¿es exhortar a una neblinosa “misericordia” para con las prostitutas, emigrantes y disidentes? ¿Hablar sin decir nada, con doble lectura?

Tras descalificar a miles de cubanos, como “gusanos”- despreciables no-personas – “lumpens” y “disidentes”. En el lado opuesto a las “personas honestas y que trabajan”. No necesitan inventar ninguna “nueva visión de Jesús”.

Basta la vieja, la única: Darles la reparación que mandan la Palabra de Dios, la Doctrina de la Iglesia, la moral universal y la hombría.

La difamación contra el prójimo se enmienda con:

Arrepentirse, reconocerse responsables de la falta, hacer propósito de enmienda, pedir perdón a los calumniados y reparar la calumnia con divulgar que no es conforme a la verdad. A un cura… ¿Hay que enseñarle ésto?!

Querer arreglarlo con sofisterías lo empeora: Como a imitación de Jesús, podemos usar de misericordia para con personas despreciables y nos categorizó como “mal vistos” en el mismo saco con las prostitutas…

Diga claramente el director de “Vida Cristiana” si opina que a los disidentes e inmigrantes es correcto o no clasificarnos como a despreciables “no-personas”, en pecado como los leprosos.

Retiren sus insultos, reconozcan “la dignidad de la persona humana”, pidan perdón. Doctrina cristiana y no evasivas edulcoradas.

Imposible retirar la difamación sin retirar el halago al Poder, que significaron esos insultos. Pues “Vida Cristiana”, tiene que reconocer que es incorrecta la “clasificación oficial” de los cubanos. Y ahora la suya de clasificarnos como “los mal vistos”. Diga: ¿”Mal vistos” por qué?

Si su exhortación a “misericordia” con “los mal vistos” tiene un ápice de seriedad, lo hará, y:

A los disidentes, las autoridades nos privan de empleo. Que los pastores de la Iglesia, nos empleen, según nuestra calificación, para que podamos ganarnos el pan.

En los mismos puestos de sus parroquias, fundaciones benéficas y escolares, de los cuales nos excluyen, como a los leprosos de antaño, y reservan para “conversos” que siguen respondiendo al Partido mientras medran en la Iglesia.

Pues hablan de “diálogo” constantemente, que los obispos no nos marginen más. No nos cierren sus puertas y oídos, ni siquiera responden una carta. (Ud., tampoco responde, P. García). Que nos reunamos algunos con Ud. y Pernús, para dialogar civilizadamente sobre lo qué pasó.

A eventos de “diálogo nacional”, invitan a profesores extranjeros y del Gobierno, a cubanos de la diáspora y jamás a nosotros. Hasta en los templos hay párrocos que temen saludarnos.

Devuélvanle las oportunidades a Dagoberto Valdés Hernández, cuya obra cívico-cultural aplastaron.

No releguen a rincones del País, al P. José Conrado Rodríguez. No repriman internamente a sacerdotes y fieles que disienten.

Y si el director de “Vida Cristiana”, no es hipócrita en su prédica de “misericordia”, que nos publique colaboraciones a los católicos periodistas independientes. Sobre Moral y Religión. Jamás le haríamos un libelo como el que nos ocupa.

Próximamente, les presentaré mi Curriculum y solicitudes de empleo. El P. García Tamayo. y S. E. R. el Arzobispo de La Habana, tienen mi correo electrónico, mis peticiones de años, sin responder, conocen mi parroquia.

Pueden citarme para ejercer en mí su misericordia y para dialogar. Todos podemos convertirnos. La Cuaresma nos invita a ello.

“Por sus obras los conoceréis”, nos enseñó Cristo. Los profesionales de la Fe, no ven que están entre los peores “mal vistos” por el pueblo y necesitan predicarle Misericordia con obras y no con palabras.

Ir del ejercicio espiritual de Loyola, a escoger en la práctica entre “el Ejército de Satán y el de Cristo”. Entre procurar la Gracia de Dios o la del César.


2) Portal de Diez de Octubre 818, año 2013 - Foto J. Leygonier.
Jaime Leygonier Fernandez

 

Periodista independiente, con una amplia producción en diferentes medios de la prensa independiente y el exilio. Escritor, ex profesor (expulsado por sus acciones políticas), fue condenado a tres años de privación de libertad en 1990 por el supuesto delito de “propaganda enemiga”, con anterioridad expulsado de la carrera de Historia en la Universidad de La Habana por no renegar del catolicismo.

Reside en Cuba y se mantiene activo en la prensa independiente, incluido el periodismo de investigación.

Es alarmante leer los comentarios que vuelan por las redes sociales, de una vulgaridad inusitada, respecto a Su Santidad Francisco

Cartas a Ofelia/ Crónica de opinión 

papafrancisco
Su Santidad el papa Francisco, Roma, 2017.

Cubamatinal/ París, 16 de mayo de 2017.

Querida Ofelia,

Te envío este escrito de mi hermano Juan Alberto Hernández, que  publicó en su página de Facebook.

“Ischia (Italia) 6 de mayo de 2017.

Es alarmante leer los comentarios que vuelan por las redes sociales, de una vulgaridad inusitada, respecto a Su Santidad Francisco, que lo acusan de parcialidad y de omisión respecto a los regímenes dictatoriales. Me duele mucho ver cómo el ser humano está tentado continuamente a juzgar al prójimo, sin saber ni tener la más remota idea de qué hablo el Santo Padre con los dictadores a puertas cerradas, de qué hablaron sus predecesores en secreto con esas personas en este mundo martirizado. Baste pensar en el papel fundamental y decisivo que en medio del silencio y la discreción que la gravedad de la situación exigía, desempeñó Su Santidad Juan XXIII en la solución de la gravísima crisis de los misiles de 1962 en Cuba, que llevó al mundo al borde del holocausto nuclear. Tengan presente que Su Santidad Francisco, como todos sus predecesores, es representante de Cristo en la tierra, electo por voto inspirado. Quién no lo sepa está aún a tiempo para informarse. Recuerden que la ignorancia consiente y enarbolada como una medalla de oro humilla la condición humana de quien la enarbola tan vulgarmente.

 

No hay que apurarse, ya está anunciada la visita del Señor Presidente Trump a Roma, pienso que eso podrá demostrar al mundo que duda de su integridad pastoral que Su Santidad Francisco tendrá y tiene una palabra para todos por igual. Traten de ser abiertos, de escuchar, de informarse, de comportarse como los cristianos que dicen ser, antes de emitir un juicio. Dicen las Sagradas Escrituras: ¡ Qué vea quien tiene ojos para ver ! Eso les ayudará a vivir en paz y mejor, pero sobre todo, eviten la vulgaridad en los comentarios, que no corresponde absolutamente a los principios de Facebook y de la convivencia social y mucho menos a los principios de nuestra civilización cristiana a las que nos vanagloriamos de pertenecer.

La Fe Cristiana no es una Fe a la medida de quien quiera decir que pertenece a ella, no es un modelo hecho a la medida de quien pretenda profesarla, antes bien, es un reto, un desafío, es algo que se profesa o no se profesa, es un acto de coherencia, no es cosa de hipócritas. ¡No olvidemos que Jesús expulsó a los mercaderes del templo ! Recordemos que cuando tengamos que rendir cuentas al Padre al final de nuestro camino, seremos juzgados con la misma vara con que nos atrevimos a juzgar a nuestros semejantes en la tierra. ¡Dicen las Sagradas Escrituras: no critiques a tu hermano porque tenga una peluza en su ojo, quítate primero la viga que tienes en el tuyo ! Además: el que esté limpio de culpas que lance la primera piedra!

¡ GÚSTELE A QUIEN LE GUSTE Y PESE A QUIEN LE PESE, REPITO A TODA VOZ QUE PIDO A DIOS QUE DÈ UNA LARGA VIDA Y MUCHA SALUD AL SANTO PADRE FRANCISCO PARA QUE PUEDA CUMPLIR SU MISIÓN EN ESTA TIERRA !”

Por mi parte estoy  harto de tantas ofensas, groserías y difamaciones  contra el Santo Padre de parte de los que quieren transformar  las redes sociales en cloacas.

Un gran abrazo desde La Ciudad Luz,

Félix José Hernández.

 

Cubanos pasean asombrados por el mall de lujo de los militares: La Manzana de Gómez

Medio/ Marti Noticias

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Varias personas observan el interior de una de las nuevas tiendas de lujo inauguradas este sábado en La Habana.

En el corazón de la capital de una nación fundada sobre ideales de igualdad social, el brazo comercial de las fuerzas armadas cubanas ha transformado una vieja galería comercial en un templo del capitalismo más conspicuo.

LA HABANA – Las vendedoras del nuevo local de L’Occitane en Provence de La Habana ganan 12,50 dólares al mes. Una botella de eau de toilette de acacia cuesta 95,20 dólares. Una crema facial rejuvenecedora 162,40 dólares la onza (30 ml).

A pocas puertas de distancia, una cámara Canon EOS cuesta 7.542 dólares. Y un reloj Bulgari 10.200 dólares. Continúe leyendo AQUI